La Casa de más de Cuatro Pisos - Parte 5

Días después de que regresan a la casa de más cuatro pisos, Iván ‘Morcilla’ trae a su hermano que cayó en bancarrota para que viva con ellos. Su nombre es Cristiano y es atendido por Tatiana y Leini únicamente. Yuriana B lee las cartas como pasatiempo mientras juega póquer con Marisa y descubre un mal presagio con la llegada de Cristiano, confirmando la lectura del chocolate.

En efecto, su llegada causa una desgracia familiar: Leini y Tatiana se pelean por Cristiano, pero a él no le causa ni la menor gracia. “Todas son así”, le dice a Juan. Días después Tatiana hace las maletas y se va de la casa.

El capitán Toribio, pese que se ha vuelto amigo de Cristiano, va en busca de Tatiana. En el cuartel coloca un aviso de búsqueda y al colocarlo junto con otros se da cuenta de una gran sorpresa: ya hay otro aviso que dice que “Se busca a Cristiano” de hace varios años.

Busca al policía encargado y le pregunta que quién fue la persona que lo mando a poner. El policía busca en los archivos y le dice que una mujer llamada Paolina hizo la denuncia hace diez años y no ha obtenido respuesta.

El capitán Toribio contacta a la mujer en una casona del barrio El Pinar y casualmente descubre que Tatiana está viviendo con ella, pues es una amiga que conoció cuando trabajó en el orfanato. Al llegar allí nota que Tatiana esta enfurecida con ella misma, pues se dio cuenta que Cristiano es un mujeriego y no puede creer que se haya ido de la casa de más cuatro pisos por su culpa.

Paolina les cuenta a ambos que él es una mala persona y desde su juventud buscaba mujeres para comprometerse y aprovecharse de ellas. Finalmente las dejaba un día antes del matrimonio y sin dinero. Tatiana se siente en la obligación de avisarle a Leini y se va con Paolina y el capitán Toribio. Cuando llegan a la casa Yuriana B les dice que es demasiado tarde, pues Cristiano ya es novio de Leini y se casarán el fin de semana.

Una extraña pelea comienza en la casa de más de cuatro pisos, pues Tatiana trata de persuadir a Leini, pero ella no le hace caso, pensando que se trata de un engaño para quitarle a Cristiano. Paolina exige hablar a solas con Leini y le entrega un cuaderno lleno de nombres, teléfonos y direcciones de todas las mujeres con las que él estuvo. Leini al fin se convence y se decepciona.

En la noche don Raimundo se le aparece en un sueño y le dice que no se sienta mal, pues él tomara cartas en el asunto. Al mismo tiempo, Cristiano recoge todos los objetos de valor de la casa y va a bajar las escaleras del tercer piso, justo en ese momento don Raimundo y Deibyd le halan el alma a Cristiano y se la entregan a las sombras.

El cuerpo de Cristiano rueda por las escaleras creando un fuerte ruido. Todos se despiertan y notan la triste escena. A pesar de lo que saben, el funeral se realiza con todos los honores, y todas las mujeres que estuvieron con él van al entierro y lo lloran. Algunas, incluso, embarazadas.

Varios años más tarde, Yuriana B presiente nuevamente la llegada de alguien que cambiará las cosas y se ponen a esperar, hasta que una limosina se estaciona frente a la panadería Calamar y tocan la puerta.